bordando el sonido

el sonido es una especie de bordado sobre la imagen, pero es un bordado de finísimos hilos que arma una compleja trama entre música, diálogos y los sonidos. Es como la imagen del velo sobre el traje de novia. Este velo, debe ser delicadísimo para que no parezca un parche sino que se fluya impersectible sobre la imagen.

Así como se ha diseñado un universo desde la dirección de arte para cada personaje, un universo con la dirección de fotografía para la película también se ha diseñado un universo sonoro para cada película.

El sonido tiene como función: sugerir el estado de ánimo del personaje, fijar ritmo, definir el personaje, fortalecer el realismo o disminuirlo en cada escena. estos son ejemplos de los infinitos usos que tiene el sonido en sus diferentes variantes.

Otro aspecto a considerar es que hay sonidos que esta en escena (diegéticos) y sonidos que aunque no se ven en pantalla crean el ambiente de la locacion o el tono de la secuencia (extradiegéticos). Un ejemplo de esto en día naranja es Ana en la peluquería, aunque no vemos la peluqueria completa, solo un rincón del lugar, colocamos sonido de secadores de pelo, agua de los lugares de lavar el cabello, tijeras y ruidos acordes a un peluquería para lograr ambientar en lugar y contextualizar por sonidos la locación. también a estos dos campos sonoros se agrega un tercero, es el el sonido interno de los pensamientos del personaje su mundo psicológico también produce una forma de ser en cada secuencia.

Uno de los grades dilemas del sonido es el sincro o sincronía exacta, como la imagen esta en un soporte y el sonido en otro y entre los pases de cine a video y luego de video a cine, sino se hacen con exactitud los mismos pasos con el sonido este se desincroniza, este es uno de los grandes dolores de cabeza de todos los cineastas del tercer mundo. Por esto se hacen varias pruebas para verificar que de verdad todo cuadre.


Al llegar a la sala de mezcla, comienzas a bordar el sonido, que en este momento es un lienzo en blanco, primero colocas todos los diálogos de la película en su lugar exacto y el correspondencia con la imagen, el segundo paso es que el músico de la película entre en la sala y coloque la música en el lugar exacto, con la intensidad requerida y el que lugar de los parlantes estará. Allí el sonidista, coloca todas los sonidos en su punto justo, en el lugar que debe ocupar en los diferentes parlantes y en equilibrio entre la música y el dialogo. Este es un arte, que requiere buen gusto, buen oído, conocimientos técnicos y mucha experiencia.

Cada uno de cuadraditos que se ven en la pantalla de la compu es un sonido que el diseñador de la banda sonora a escogido meticulosamente para la secuencia. Franklin tiene un año y medio preparando la banda sonora de día naranja.